Luz blanca.
Luz Negra
Foto: Pequeño Muñeco Bule
Luz blanca.
Luz Negra
Foto: Pequeño Muñeco Bule
Ojala todas las semanas el calendario marcara un puente festivo.
Los chavales apurando la mecánica de sus ciclomotores… aunque de vez en cuando alguno me de un susto…
Los más pequeños también se lo pasan bien jugando con sus mascotas.
Álvaro nos tiene a todos con la boca abierta… que guapo que es el canalla.
Es un villarejano de pura cepa… de padres, abuelos y bisabuelos Villarejanos…
Todos lo hemos pasado muy bien… y si la cabra siempre tira para el monte… yo me bajo al río.
Saludos desde la Villa.
Este puente festivo ha traído muchas cosas al pueblo. Senderistas, amigos, familia y algún que otro cazador dispuesto a disparar a todo lo que respire por el campo.
Yo también he disparado… unas cuantas instantáneas. Ha caído en mis manos una fantástica cámara fotográfica. Tiene en la mochila varios objetivos… uno de ellos es un gran angular… y es muy divertido mirar a través del visor.
Esta es una de las que más me gusta. El edificio es toda una insignia del pueblo.
Las escuelas las son de principios de los años 30 y todos los materiales son de la zona.
El carpintero era de San Martín, los ladrillos se hicieron en Villarejo… en el tejar que había al final del Perchel.
Ojala algún día vuelva a estar abierta… pero no como casa rural
Si no como Centro de día para nuestros abuelos.
Buscando en una caja encontré estas fotos.
El pueblo que yo recuerdo de pequeño no todas las calles estaban asfaltadas…
La plaza estaba rodeada de arizonicas.
El camino a la comarcal era de tierra…
La calle del embudo.
Mataperros.
Buenos días Villarejanos todos.
En otoño el cielo es un espectáculo, hay dos sesiones que nadie debería perderse el Ocaso y el Alba, cirros y cúmulos danzando al son del viento, iluminados por el sol que aparece y se escapa por el horizonte.
Hoy ha amanecido lloviendo un poco, me gusta la lluvia que cae en otoño. Riega el campo y lo deja todo verdecito.
Poco puedo decir, una imagen vale mas que mil palabras.
Hay cosas que no tienen precio… saludos desde el paraíso.